El estrés, según la Real Academia Española de la lengua, es la «tensión provocada por situaciones agobiantes que originan reacciones psicosomáticas o trastornos psicológicos a veces graves». Una carga excesiva que puede provocar lesiones y molestias a corto, medio y largo plazo. Pero numerosos estudios han detectado que el estrés afecta al hipocampo, una estructura cerebral clave en la memoria y en el proceso de aprendizaje.
En El País Retina han entrevistado a Elisa Sánchez, Directora de Idein, para explicar cómo afecta el estrés a la pérdida de memoria y qué se puede hacer para reducir el estrés en el trabajo.
Elisa Sánchez, psicóloga laboral, refuerza esta idea pero añade que también puede tener alguna repercusión en la memoria a largo plazo como daño colateral. «El estrés afecta al sueño y nos impide descansar y dormir profundamente. Al tener menos fases REM —la fase del sueño profundo en la que se sueña y se consolidan los recuerdos y la información almacenada durante el día— no se pasan los datos a la memoria a largo plazo».
Para leer el artículo completo de Victoria S. Nadal en El País Retina, pincha en este enlace.