El estrés está detrás de muchas de las enfermedades y dolencias que sufrimos en nuestro día a día. Existen problemas físicos (úlceras, problemas musculares o cardíacos) que son consecuencia directa de una elevada situación de ansiedad, en muchos casos nacida en el ámbito laboral.
En El Economista han entrevistado a la directora de Idein, Elisa Sánchez, para conocer las consecuencias que tiene el estrés y una elevada carga de tensión en el trabajo en nuestra salud.
Según la psicóloga Elisa Sánchez, uno de los obstáculos para que las empresas tomen las medidas necesarias para evitar el estrés laboral en sus trabajadores es que en España este problema no se considera una enfermedad profesional, algo que sí ocurre en otros países europeos. Sin embargo, en varias sentencias, el Tribunal Supremo ha considerado accidente laboral un infarto sufrido por un trabajador como consecuencia de su estrés laboral, según señala Ana M. Pérez Castillo, abogada responsable de Relaciones Institucionales de Sagardoy.
Elisa Sánchez señala que el estrés es «la manera en que uno reacciona ante ciertas demandas. Pueden ser autoexigencias o demandas externas». Cada persona es diferente: «Ante un mismo jefe y unos horarios similares unos se estresan más, otros menos y otros nada en absoluto. Existen personalidades con patología de ansiedad. Hay amas de casa que sufren estrés y cirujanos que no lo padecen». «Poca gente pide bajas laborales por estrés. Van al médico cuando ya les ha generado una úlcera, un problema cardiaco o ataques de ansiedad», señala la psicóloga. A Israel Montero, director del área de deportes del Grupo V, con cuatro revistas de tirada nacional a su cargo, el estrés le ataca la espalda, lo que le hizo recorrer un médico tras otro hasta que le dijeron que la causa era más bien psicológica.
Aquí puedes leer el artículo completo de María Domínguez en El Economista.