Muchas veces nos asaltan pensamientos negativos. Que nos va a salir todo mal, que nuestra pareja nos va a dejar, que no va a venir nadie a nuestra fiesta de cumpleaños, que nos van a despedir… Uno de estos pensamientos negativos más recurrentes es creer que no estamos suficientemente capacitados para realizar la actividad con la que nos ganamos la vida. Que no valemos para el trabajo que estamos realizando.
Para evitar que estas sensaciones, estas imaginaciones, se trasladen a la vida real es importante (además de la formación y la experiencia que se presuponen para el cargo) tener una correcta actitud. No conformarse y seguir teniendo una exigencia que haga que esas ideas de «no valer» para un trabajo queden desterradas.
Para hablar sobre esto, desde El País Retina han contactado con la directora de Idein, Elisa Sánchez.
Esta sensación de inseguridad continua afecta a las carreras profesionales. “Pensar que no eres capaz de algo te hace más conservador, por eso es raro que se arriesguen o pidan aumentos de sueldo y ascensos”, explica la psicóloga laboral Elisa Sánchez. “Así que es habitual que trabajen por debajo de su potencial. Se conforman”. Adoptar esta actitud facilita que se estanquen y, probablemente, que cobren menos de lo que merecerían. Sánchez asegura que también es habitual que “tengan mucha dedicación al trabajo, sientan culpa relacionada con la autoexigencia, tapen sus debilidades y consideren un problema sus imperfecciones”.
Para leer el artículo completo de M. Victoria S. Nadal en El País Retina, pincha en este enlace.